domingo, 24 de febrero de 2008

Viajes por el scriptorium, de Paul Auster.

Hace muy poco que una amiga me dejó este libro y me resultó muy llamativo como lo describió "es un libro en el que no pasa nada" me dijo, al momento pensé "entonces, qué cojones me importa? paso del libro", pero es la típica mierda que piensas y no dices, probablemente porque sabes que te equivocarás, por no hacer daño o por ambas cosas.

En fin, Viajes por el scriptorium es uno de esos libros que, sin saber porque, te enganchan desde el principio, tal y como fui advertido, no es que pase gran cosa en el libro : un anciano está encerrado en una habitación, no recuerda nada, no sabe quien es, no sabe si está en una cárcel, en un hospital o en su propia casa, desconoce si está retenido allí por la fuerza o por su propia voluntad. Este anciano es Mr Blank, durante la narración, recibe la visita de varias personas, unas le muestran su gratitud, otras le entredejan ver su odio, pero Mr Blank no consigue reconstruir quien es...

Un libro recomendable por los cuatro costados... a pesar de que no ocurre nada , lo cierto es que nunca antes había leido nada de Paul Auster, pero debo decir que me gusta, parece que mi amiga no se equivocó ;-)

sábado, 16 de febrero de 2008

Archipiélago gulag. Volumen II.

Hará tres semanas que terminé la última parte de este gran libro, no es de extrañar que a su creador le diesen el premio nobel. Si en la primera parte del libro se describía la detención, los primeros días en las celdas y el "proceso" judicial al que eran sometidos los prisioneros políticos en la antigua URSS, en la segunda se describe el traslado de los presos a los gulags, las penurias, las palizas...

Hay que destacar como se hace el traslado, como se pueden apiñar en una vagón a tantas personas, la sola descripción de como se hacía esto da escalofríos, además de esto hay que añadir las cuestiones... "logísticas" necesidades fisiológicas, alimentación, calefacción, el autor habla de su cautiverio en la Lubyanka de la KGB como un balneario en comparación con el traslado mediante trenes atestados de presos.

Mezclar a los presos políticos con los presos comunes no era casual, un preso político no es un ladrón ni un asesino, tampoco es un malhechor, está en la cárcel por como piensa, no por lo que hace, lo que le hace especial son sus pensamientos, no sus actos, así que se puede uno imaginar lo que puede ser un preso político en manos de asesinos, ladrones, violadores...

Y finalmente la parada final: el gulag, campos diseñados para torturar el cuerpo de los condenados, pues su alma ya había sido casi destruida...

¿Como pudo pasar esto en el paraiso de los trabajadores que aspiraba a ser la URSS? ¿Como dejaron al canalla de Stalin destruir el primer estado proletario de la humanidad? ¿Nadie hizo nada? ¿Se podía haber hecho algo? ¿Y todos sus complices, los de la KGB, los policías, los delatores, los miembros del PCUS?

Volviendo al tema estrictamente literario creo que es un gran libro, al menos lo ha sido para mi, uno de esos libros que recomendarias a ciertas personas, no a todas, pero si a algunas, te toca el alma, y hasta sientes que pierdes una parte de ella por leerlo, no me dejó indiferente, no es de esos libros que olvidas... Merece la pena.

Finalmente, algunas frases que he recopilado mientras lo leía


  • Lo primero que los ingenieros vieron en el golpe de estado de Octubre fue la ruina del pais (Y, efectivamente, años y años de ruina se abatieron sobre nosotros). ¿Como iban a aceptar los ingenieros la dictadura de los trabajadores, de sus propios subordinados en la industria, menos cualificados, que no dominaban las leyes físicas y económicas de la producción, pero que sin embargo ahora ocupaban los principales despachos y dirigían a los ingenieros? ¿Por qué los ingenieros no habrían de considerar más natural una estructura social en la que tubieran al mando aquellso que pueden dirigir de forma racional su actividad? [...] ¿Y por qué habían de renunciar los ingenieros a tener opiniones políticas?
  • Nos gusta descargar nuestra cólera contra los débiles, contra quienes no pueden responder. Es la naturaleza del hombre. Y siempre surgen motivos para demostrar que tenemos razón.
  • En una sociedad, la comprensión de la Historia va madurando poco a poco.
  • "-¡No, no somos revolucionaros como vosotros! ¡No, no somos rusos como vosotros! 'No, no somos comunistas como vosotros". Refiriéndose a lo que deberían haber respondido durante los juicios.
  • ¿Qué más da un Lenin que un Trotski? ¿ Es qué es mejor uno que otro? Con ellos empezó todo.
  • Un hombre casi siempre acepta con sumisión que otro lo mate ¿Por qué hipnotiza de tal manera la pena de muerte? En la mayoría de los casos, los indultados no recuerdan que nadie de su celda se haya resistido.
  • ¡Esperanza! ¿Nos haces más fuertes o más débiles? si en cada celda los condenados se unieran para estrangular a los verdugos que entran ¿no cesarían las ejecuciones más facilmente que con apelaciones?